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ENSAYO LA FORMACIÓN INTEGRAL DEL JOVEN DE EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR

INTRODUCCIÓN.
Es importante realizar cambios en nuestra tarea docente y en el acompañamiento de nuestros tutorados, con la finalidad de evitar la deserción y lograr que nuestros jóvenes adquieran una formación integral que les permita ser capaces de desempeñarse e integrarse con mayor facilidad en el ámbito laboral, social, educativo, político, familiar  y personal. Ya que actualmente vivimos en un mundo globalizador y de cambios tecnológicos acelerados.
Para lograrlo, primeramente, es indispensable tener en claro lo que es una formación integral del joven, por lo que en el presente ensayo se aborda esta temática.
El ensayo esta conformado por el desarrollo, conclusión personal y las referencias bibliográficas y/o electrónicas.
Dentro del desarrollo, se aborda el concepto de lo que es  la formación integral, los objetivos que persigue, el rol del tutor para contribuir en la formación integral de los educandos y las acciones propuestas para lograrlo.
En la conclusión personal, con base al análisis de la información establecida en el desarrollo, se plantea una reflexión de manera crítica y propositiva acerca de la contribución docente en la formación integral del educando.
Y por último, se muestran las referencias bibliográficas y/o electrónicas que fundamentan este trabajo.

DESARROLLO.
Para transformar nuestro quehacer educativo y contribuir en la formación integral del alumno, es primordial tener claro lo que es la formación integral,
La formación integral es el proceso continuo, permanente y participativo que busca desarrollar armónica y coherentemente todas y cada una de las dimensiones del ser humano, a fin de lograr su realización plena en la sociedad. (ACODESI, 2002: 13).
Entonces, la formación integral es un estilo educativo que  no solo busca instruir a los estudiantes con los saberes específicos de las ciencias, sino tiene como objetivos el desarrollar de manera plena, cada dimensión física, psicológica, social y espiritual, que conforma a la persona o joven  para que crezcan como personas buscando desarrollar todas sus características, condiciones y potencialidades para alcanzar el bienestar integro y pleno que le permita transcender.
Pues el mundo de hoy, exige  la formación de personas con la capacidad de desenvolverse de manera fluida y armónica en distintos contextos, con capacidad de tomar decisiones, de trabajar con otros, de comunicar sus ideas, de gestionar su actuar en vista de metas personales, escolares y laborales, entre otras.

Las instancias educativas, se han preocupado por proporcionar a los educandos, una formación integral. A nivel medio superior, se ha establecido la Reforma Integral Educativa del Nivel Medio Superior (RIEMS) que busca desarrollar en el estudiante y docentes competencias que permitan el desarrollo pleno en cada dimensión que conforma a la persona.

El docente o tutor es un elemento clave para lograr la formación integral en los estudiantes, de aquí la gran importancia de ejecutar las competencias genéricas, disciplinarias y actitudinales para redefinir mi labor educativa y formular estrategias que no solo tengan un acompañamiento académico, sino que considere las otras áreas o dimensiones que conformen al alumno. En este nivel educativo, los jóvenes se encuentran en una etapa de formación de su personalidad, por lo que

La escuela es un medio para fortalecer la personalidad de una manera responsable, ética, critica, participativa, creativa, colaborativa y con capacidad para interactuar con el medio en la construcción de una identidad cultural (RAMOS, 2)

Mi rol como  tutor debe estar enfocado en implantar acciones  para atender lo personal, psicológico, social y espiritual, para que la educación y el acompañamiento que les brinde a mis tutorados, sea siempre con un enfoque  integral, que contribuyan a desarrollar las competencias deseadas, y no solo en la materia que imparto sino también en su persona.
De manera que las cinco acciones que propongo para alcanzar la formación integral de los jóvenes son:
1.- Realizar un diagnostico integral de forma individual, contemplando todas las dimensiones mediante un cuestionario, a fin de detectar sus necesidades o problemáticas, y conocer mas a fondo a cada uno de ellos.
2.-Llevar una ficha de seguimiento individual de cada uno de mis tutorados y trabajar en la problemática identificada, mediante actividades remediales.
3.- Apoyarme de los padres de familia, convocándolos de forma personal, para reporte de calificaciones y de actitud, a fin de buscar soluciones y apoyarnos en la superación de las problemáticas identificadas de los alumnos, cuando sea necesario.
4. Ser empática y estar dispuesta a escucharlos en el momento que ellos lo requieran, mostrándoles respeto, afecto e interés en sus necesidades.
5. Hacer uso de las Tecnologías de la Información y comunicación en el proceso de enseñanza-aprendizaje, ya que es el actual contexto en el cual se desarrollan los jóvenes de hoy.
  
CONCLUSIÓN PERSONAL
Como  docentes y tutores, debemos mirar atrás y revisar,  que aspectos de nuestras acciones educativas y tutoriales debemos modificar; e implementar las estrategias que se requieren para formar estudiantes autónomos e independientes, que con facilidad puedan integrarse a la vida laboral, social, educativa, política, familiar y personal.
 Nuestro rol de tutor debe estar enfocado en apoyar a nuestros tutorados, para que además de lograr concluir sus estudios, les permita lograr una formación integral,  atendiendo sus necesidades e intereses, así como prestar atención a aquellos factores internos y externos que inciden de forma directa o indirecta en el proceso de su aprendizaje y desempeño, y al mismo tiempo, evitar que se involucren en situaciones de riesgo.

El contexto de nuestros jóvenes ha cambiado, y nosotros los tutores debemos adaptarnos a estos cambios para poder comprenderlos y brindarles un mejor acompañamiento,  una buena orientación y formación.

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